El ángel negro

Carlos Eduardo Robledo Puch. No había cumplido la mayoría de edad cuando ya era el mayor criminal múltiple de la Argentina (Buenos Aires) es un asesino serial argentino. Apodado El Ángel Negro por los diarios nacionales, se lo ha condenado por diez homicidios calificados, un homicidio simple, una tentativa de homicidio, diecisiete robos, una violación, una tentativa de violación, un abuso deshonesto, dos raptos y dos hurtos. Se trata de la persona con más delitos graves imputados en el país.

Luego de una ola delictiva impresionante, fue detenido el 4 de febrero de 1972 al encontrar la cédula de identidad en el bolsillo del pantalón de Somoza (complice de Robledo Puch pero este lo asesino de un disparo y le desfiguro el rostro con un soplete). Recién había cumplido 20 años. Fue juzgado y condenado en 1980. Sus últimas palabras ante el tribunal de la Sala 1ra de la Cámara de Apelaciones de San Isidro fueron "Esto fue un circo romano. Algún día voy a salir y los voy a matar a todos".

Llama la atención lo expuesto en la pericia psiquiátrica adjunta en el expediente del juicio a Robledo Puch.
• "Procede de un hogar legítimo y completo, ausente de circunstancias higiénicas y morales desfavorables".
• "Tampoco hubo apremios económicos de importancia, reveses de fortuna, abandono del hogar, falta de trabajo, desgracias personales, enfermedades, conflictos afectivos, hacinamiento o promiscuidad".

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Robledo Puch solicita su libertad condicional. El juez que atiende su solicitud se la deniega por considerar que no se ha reformado de manera positiva en ningunos de los aspectos sociológicos necesarios para vivir en libertad, además de no poseer familiares directos que puedan contenerlo. El 31 de agosto de 2011, se le volvió a negar la libertad solicitada